Hay estudios que han relacionado la soltería con una mayor sensación de libertad, sentimientos más fuertes de autodeterminación y niveles más altos de creatividad.
La soltería es abundancia.
Es la única etapa que tienes contigo para auto reflexionar, para trabajar en ti, para escucharte y sentirte, para reconocer y gestionar tu mundo emocional, para conquistar tus anhelos, para auto conocerte, Sacar a relucir tus dones, para construir una vida que te dé orgullo y llamar tuya.
Se trata de una soltería que no implica soledad ni aislamiento.
Y así, luego decir, si es tú decisión, vamos a compartir la vida, pero ya no a partir de la codependencia sino de la interdependencia.
Puedo estar bien solo, pero prefiero estar contigo. Ahí hay mucho poder, cuando tú prefieres y no necesitas estar con alguien, sueltas el apego, ya no es algo que te afecte, ya no hay relaciones dependientes, ya no hay " tú eres mi mundo entero" y si tú te vas, ya no tengo nada porque vivir, al contrario me tengo a mí y tengo tanto mundo.
Es importante no irse a los extremos porque nos volvemos codependientes (carencia de amor propio) o super independientes (egocentrismo), en ambos casos no podemos conectar sanamente con nadie.
Una vez que nos damos tiempo para vivir intensamente esta etapa, se puede decidir construir una relación sana, atendiendo los pilares principales: comunicación, respeto, confianza, sexualidad, etc.
Tener pareja no es obligatorio. Lo que si es tu responsabilidad es aprender a actuar a través de la interdependencia para relacionarse sanamente con las personas, pareja, familia, amigos, compañeros de trabajo, en toda relación humana.
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